La herramienta esencial para todo emprendedor
- Alexa Ortigosa
- 1 jul 2017
- 2 Min. de lectura
Tener tu propia tarjeta de presentación es esencial para tu vida profesional ya que es una herramienta de diferenciación y acercamiento para tus clientes, proveedores, socios, inversionistas, empresas etc.
Esto no es solamente un simple papel esto ayuda a hacerse notar y tener un branding personal bien definido por cómo es tu personalidad o bien por el giro de tu empresa y poder destacarte. Para lograr todo esto tienes que tener en cuenta algunos aspectos importantes de los cuales te mencionaré a continuación.
Tus datos personales Nombre completo o de la empresa:Preferentemente que sea lo que más se destaque. El cargo que se ocupa: Gerente, vendedor, mercadólogo, diseñador, etc. Logotipo, Imagotipo, Isotipo e Isologo: Es la imagen o texto (o la combinación de las dos) dónde se destaca tu empresa. Datos de contacto: Número de celular o teléfono, correo electrónico (tiene que ser sencillo y profesional). Dirección del lugar de trabajo y la página web. Redes sociales: Se pueden integrar LinkedIn, Facebook o Twitter. Todo esto tiene que conjuntarse a manera que no se vea saturado y con información demás. Tiene que ser elegible, concretar las tipografías, color y también el diseño de la misma.
Tamaño El tamaño es importante siempre tiene que pensar en los usuarios que van a tener tu tarjeta de presentación, es decir, lo más probable es que lo tengan en sus carteras. Por lo tanto la medida ideal es 8x5 cm. En algunas ocasiones hay personas que tienen sus tarjetas de presentación en otros tamaños para destacarse como lo son las tarjetas de presentación cuadradas de 5.5x5.5 cm y circulares de 6.5x6.5cm.
Diseño El diseño es también es fundamental para el desarrollo del mismo, para esto necesitas jugar con las formas, diferentes modelos, la combinación de colores, decidir si va hacer con doble cara, etc. Lo más recomendable es mandarlo a hacer con un diseñador gráfico para que te pueda crear algo único. Si es para una empresa tiene que ser con los colores y la tipografía establecidos para que todo lleve una similitud con la imagen corporativa.
Entrega de tus tarjetas Cuando ya tengas tus tarjetas, ten el hábito de llevarlas a todas partes. Nunca se sabe cuándo podrás tener a tu próximo cliente o un nuevo proyecto en puerta. Aquí te muestro algunos ejemplos:
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